No solemos tomarnos en serio frases como "los sueños se hacen realidad" parecen superficiales y cursis.
Creemos que son sólo armoniosas para una boca, dulces de pronunciar, descocadamente bellas e ilusas.
Los hombres sueñan. Sueñas cuando duermen, pero también sueñan despiertos.
El otro día soñé dormida y hoy a la mañana tuve una secuencia desconcertante.

Soñé que mientras sonaba de fondo me gustas mucho, nos besábamos. Creo que ni siquiera corrió una semana entera cuando me vi efectivamente besando al mismo individuo con el que previamente había fantaseado y lo más curioso de la historia es que, ya de costumbre, cuando llego a mi casa, más precisamente a mi cama, luego de unas largas horas de ausencia de sol y lejos de mi hogar, prendo la radio y una luz tenue para conciliar ese sueño que tan poco me cuesta ya que siempre termino muy cansada. Resulta que mientras realizaba dicha costumbre, en la radio sonó esa canción de Viejas Locas. Y yo me dormí con una sonrisita en la cara que me decía sin más coincidencias, casualidades y causalidades, me retiro anunciando una noche buena para todos. Buenas noches porque las noches no son malas, he dicho que buenas son.