Palabras verdes sin melodías.

(Primer intento)
Un poco de pimienta pa' condimentar esta canción,
con la que acompaño tu guarnición.
Esta noche de arañas que tejieron su trampa,
no me voy de acá sin tu mañana.
Un mundo de mandalas y de flores,
te convido pa' que tomes de este amor azucarado.
Dejá la arrogancia, la soberbia y toda la malicia,
y vení conmigo que te transporto hasta Galicia.
Quiero todo lo que la mente me adorna,
un par de musiquitas, un rayito ardiente de sol, una mano que me apriete
y si no hay banquito, nos sentaremos en el piso.
No hables que pesan las palabras,
no aclares que no hay tormenta que arreglar,
reite que nunca se termina
y besame que no hay tiempo que perder.

(Intento número 2)
La percusión nos invita a vaguear,
el humo que se empeña en el cigarro acabar,
la lluvia que se quiere precipitar
y un par de buenos momentos para recordar
alcanzan a llenarme el hueco del corazón.
Ay que me cortaste el rostro!
Ay que te fuiste con la luz apagada!
Muy galán, quiero que sepas que ya sueño con que me vengas a buscar.
Hoy le canto a la luna, el mar y la belleza
que se esconden entre tanta maleza.
Viento que me sopla húmedo el cuello,
me invita a un cometa remontar.